Manual de la Alegría (XXVI)
En un lugar del corazón reconstruimos
las ruinas de la edad y los esfuerzos vertidos
en combates dispersos y sueños derrotados.
En esa válvula mitral o ventrículo del alma,
o castillo interior, o jardín diminuto,
mantenemos intactas las esperanzas.
Cuando soplan el siroco y la calima,
queda un lugar habitable aún en este territorio:
algo de dignidad en la desgracia,
algo de estoicismo en el sufrimiento,
algo de coraje en la desdicha,
el valor indomable de los hombres libres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario